Por deméritos propios

Casi nada de lo que se vio ayer en Chapín es normal. Especialmente Hevia, que se sale de los parámetros del arbitraje pátrio standard, malo, para entrar en el terreno de lo dantesco. Quede claro que el Alba vuelve de vacío debido a nuestra inoperancia, a nuestras carencias. Mal planteamiento y flojísimo nivel defensivo. Creación cero. Y ni un tiro entre los tres palos de Chema, a excepción hecha de los penaltis.

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Antoñito batiendo a Cabrero y cerrando el partido. Imagen: Gente

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Lo comentó a lo largo de la semana y finalmente Juan Ignacio se decidió por variar el once que ganó al Sevilla At. “Dar importancia al trabajo semanal” lo llama el mister. Richie por Verza. Pasito atrás y movimiento en contra de la política de “defiendan ustedes teniendo el balón”. Nuestro centro del campo pierde capacidad de crear, de tener y sacar el balón, obligándonos a sufrir más. Encima, Viqueira campó a sus anchas a pesar de nuestro doble pivote defensivo. Para ser totalmente justos hay que hacer notar que prácticamente no hubo tiempo de ver el planteamiento que buscaba JIM: quince minutos duró el partido. Y es que si alguien fue ayer el protagonista del choque, ese es el del pito. Por eclipsar, ni un solo comentario en prensa, hasta nuestra equipación verde pasó desapercibida. ¿Será cosa de Luanvi?. En la imagen, de Gente, Juan Ignacio da instrucciones a Ritchie.

Quince minutos, decía. Para entonces, Hevia ya había señalado como penalti un encontronazo entre Tarantino, Moreno y Redondo dentro del área local. No es penalti y, aunque se sancionan diez mil al año aun peores, consideremos que entra en la lógica. Esta vez, cosa que tampoco es muy común, nos favorecía la decisión y Álex Pérez nos puso por delante. Y aquí se acabó la normalidad.

Al filo del minuto 18, nuestro amigo el del pito echó a Esteban Vigo por recriminarle que no diese una ley de la ventaja. Se ve que el bueno de Esteban no sabe que la mayoría de los colegiados son incapaces de dejar seguir una jugada y amonestar después. Sumando lo farfollas que es el Sr. Obras le faltó tiempo para montar el numerito, sacar pecho y mandar al palco al mister local al grito de ¡Fuera¡.

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Hay más: Pedro Ríos, que sacó de sus casillas a Peña durante todo el partido, pone un balón a Antoñito cuyo disparo atrapa Jonathan. Calle, un rato después, mete el pié. Jonathan se revuelve y el delantero le da un sopapo. Hevia Obras expulsa a ambos. Aquí hay más tela que cortar y aunque Jonathan haga ademán de ir a buscar a Calle el único que agrede es nuestro amigo Antonio. Lo que dice Mr. Obras en el acta de la expulsión de Antonio Sánchez “ay-que-frío-hace-aquí-tan-lejos-de-casa" De la Calle es, simple y llanamente mentira: "Tras recibir un golpeo por parte del portero del Albacete este jugador golpeó con la mano en el rostro de manera violenta a su adversario". Yo tiraría de video porque si la expulsión viene por intentar golpear, nada que objetar. Pero lo del acta es mentira. Imagen: Gente.

Normalmente escribo mi análisis el día después del partido, con los ánimos más apaciguados y otra perspectiva. Pero hoy me ha pasado al revés: tengo un rebote de mil pares. Hay un tema que me parece ya no denunciable ante la justicia deportiva y sus estamentos (en los que no creo en absoluto), sino algo que se puede elevar a la justicia ordinaria. Respecto de la misma jugada, Esteban Vigo dice en Jerez Información: “no me puedo enfadar. No puedo sacar una valoración porque me queda muy lejos. Creía que iba a sacar una amarilla al jugador del Xerez. La expulsión de Calle y del portero la ha decretado el cuarto árbitro”. ¿Es que el cuarto árbitro sigue las imágenes por un monitor? ¿O era por Localia? ¿Es que han cambiado las normas y no nos hemos enterao? ¿Eso se hace en todos los partidos?  ¿Será que tiene ojo de águila? ¿O es que la fuerza lo acompaña? Ya sabia yo que la fulana wireless entre árbitros y asistentes iba a dar más problemas que otra cosa. De verdad que todo esto me sobrepasa. Serán los años.

xerez-alba-2008-2009-04.jpgJuan Ignacio sacó a Álex Pérez para que entrara Cabrero. Creo que no acertó. Escoró a Merino a la izquierda y construyó una autopista de seis carriles para Pedro Ríos, que ya venía desbordando por carretera nacional sin problemas hasta entonces. El doble pivote Ritchie – Begoña, muy metidos ambos atrás, dejaban a Viqueira jugar a su antojo. Ambos factores facilitaron que el Xerez pasase por encima del Alba. Antoñito pudo empatar totalmente solo en una jugada en la que que Leonardo Dantés, que ayer asistía a Mr. Obras, no señaló la posición antirreglamentaria del andaluz. Antes del descanso, en una jugada parecida, Aythami fusilaba a placer y empataba. Imagen: Gente.

 

xerez-alba-2008-2009-05.jpgLa segunda mitad comenzaba como acabara la primera, con esa sensación de la pasada campaña de que tarde o temprano nos la acabarían clavando. Narraremos los hechos centrándonos en Mr. Obras, que por si no estaba claro ya, se empeñó en subrayar más lo malo que es. Sancionó con amarilla sendas entradas de Mendoza y Aythami sobre Marco Navas y Diego Costa, por detrás y sin intención de jugar el balón. La de Mendoza fue, además, violenta por lo que no debió seguir en el terreno de juego. En la imagen (Gente) otro lance más propio de Kung Fu que de fútbol con Jaime como víctima. El honorable maestro Obras mandó seguir.

 

 

 

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A renglón seguido, señaló penalti en un derribo de Aythami a Merino fuera del área, pero el central Xerecista debió irse a la calle con Calle y no lo hizo. Merino marcó pero Mr. Obras no lo vio. Y como en el campo no hay repetición, mandó lanzar de nuevo. Jamás entenderé por qué un árbitro señala como penalti una falta que ve fuera, porque la ve. Y menos aun por qué le remuerde después la conciencia y trata de compensar mandando repetir si le sale de las narices. Puede que normalmente no pase nada, pero ayer Merino cambió el lugar de disparo y Chema hizo un paradón. En la imagen (Gente), el cabreo de nuestro 10. Y del blanco, al negro.

 

Los locales, a lo suyo, con Viqueira jugando a placer y Pedro Ríos sembrando el pánico por su banda. JIM no anduvo listo con los cambios, retrasándolos en exceso. Para cuando entraron Verza y Jaime, Antoñito ya había dado el partido al Xerez al aprovechar un buen pase de Ríos. El show de Mr. Obras acabó con la expulsión de Mendoza por entender que simulaba una caída en el área, pero para mí que se la guardaba desde la entrada a Navas. El Xerez con nueve, pero ni con esas: fuimos incapaces de, ni tan siquiera, poner en aprietos a Chema.

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Bien: Marco Navas. Lo intentó cuanto pudo en ataque y se sacríficó en labores defensivas cuajando un buen encuentro en su regreso a Chapín. Imagen: Gente.

Mal: la defensa. Aguas por los laterales, aguas por el centro y aguas por el pivote: imposible achicar a semejante ritmo.

El del pito: Hevia Obras. No se me ocurren calificativos. Increíble lo del madrileño. Lo único que hace es colocarse bien, pero para lo que le sirve podría dirigir desde su casa. Mal en las faltas, mal en la ley de la ventaja, criterio surrealista al amonestar y, para colmo, gesticulante y gallito. Ni que decir tiene que fastidió a unos y a otros mediatizando totalmente el desarrollo del partido. Para completar el lote, ha incorporado a su terna a Leonardo Dantés, exauxiliar de Amoedo Chas. Entendible es que los colegiados se equivoquen. Pero alguien debería hacer algo porque actuaciones de este calibre no son dignas ni del campo de mi pueblo.