Las medidas de seguridad desplegadas por el Albacete Balompié, con el refuerzo de la seguridad privada que presta sus servicios dentro del Carlos Belmonte, así como el ferreo control que una Unidad de Intervención Policial llegada desde Madrid impuso a los 150 aficionados del Rayo Vallecano desplazados a la capital albaceteña, impidieron que se produjera altercado alguno tanto antes, como durante y después del encuentro.
Si que se pudieron escuchar en el Carlos Belmonte alguno cánticos de provocación que, según recoge el portal iusport.com citando al programa Tiempo de Juego de la Cadena COPE, provenían de la afición rayista y que también según el citado espacio radiofónico acusaban de forma sarcástica al bravo jugador albaceteño de comunista, textualmente dichos cánticos habrían sido "Es comunista, Zozulya es comunista".
Según ha podido saberQuesomecanico, a lo largo de la semana en determinadas redes sociales y foros, se había detectado cierta actividad por parte de determinados grupúsculos de la izquierda radical asentados en la capital de España que podría hacer preveer algún tipo de problema de orden público. Sin embargo todo quedó en eso, gracias al excepcional trabajo realizado en el estadio albaceteño en medida de seguridad. Prueba de que la preocupación existía es que se pudo ver al Comisario de Albacete Florentino Marín de uniforme en el palco del Belmonte.
Por otra parte, y como es habitual, la afición albaceteña se comportó de manera ejemplar evitando cualquier tipo de confrontación, enfrentamiento, y/o provocación con los seguidores visitantes.
Hay que recordar que, tras la disputa de este encuentro, queda todavía pendiente el segundo tiempo del encuentro Rayo Vallecano - Albacete de la primera vuelta y que, a día de hoy, sigue pendiente de fallo por parte del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).
El TAD, previsamente, atendía parcialmente, el pasado 14 de febrero, la petiición del Rayo Vallecano de suspensión cautelar del cierre del fondo del Estadio de Vallecas durante dos encuentros así como de la disputa de los 45 minutos restantes del Rayo - Alba a puerta cerrada.