Cuando menos se esperaba

Quien más, quien menos, tenía serias dudas de que el Alba pudiese volver con algo positivo de Vallecas, un campo donde ningún visitante había salido victorioso en el último año y medio. Y la sorpresa fue muy grata porque el Alba, dirigido por Máximo Hernández tras el cese de JIM, completó lo que, con total seguridad, ha sido su mejor encuentro a domicilio venciendo sin paliativos al Rayo Vallecano por un contundente 0 - 3, tantos logrados por Jaime, Xavi Jiménez y Tarantino. Con 44 puntos en el casillero, el Alba acaricia la permanencia y así poder disfrutar, y que disfrutemos todos, de una recta final de Campeonato sin sobresaltos.

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Sobresaliente. Diego Costa, solo le faltó el gol, completó un gran partido en Vallecas (Imagen: Gente)

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La visita a Vallecas se antojaba complicada. Primero, porque el Rayo es un equipo con hechuras de ascenso, que venía completando una notable temporada y que presentaba unos números como local que daban miedo. Segundo, porque el Alba hacía tiempo que no se mostraba como un equipo solvente. Y tercero, porque JIM había sido cesado hacía escasamente una semanapor su jefe, Máximo Hernández, quien se encontraba de nuevo a los mandos y, qué queréis qie os diga, daba la impresión de que habíamos salido de la sartén para caer en las brasas. No han sido ni una vez ni dos las que hemos criticado las elecciónes y sistemas de el de Torrevieja, que finalmente parecen haberle costado el puesto. Pero no es menos cierto que ni nos convencía su cese ni, por supuesto, la alternativa que el consejo nos ofrecía para el banco, a saber, la vuelta del mismísimo Director: Máximo Hernández reloaded (Imagen: Gente).

La receta aplicada por Máximo fue simple: colocar a un lateral derecho natural (KIkeTortosa) en el once con lo que se evitaba un gran agujero en la zona, alinear dos interiores (Jaime y Navas) con lo que no se desaprovechaban las bandas, apretar en el centro del campo con la inclusión de Alberto junto a Kitiko y Begoña y retornar al sistema de un único punta, Diego Costa, como referencia ofensiva. Y la jugada le salió perfecta.


rayo-alba-08-09-03.jpgAntes del minuto cinco, un pletórico Costa ya había dejado un balón que valía medio gol a Marco Navas, que lo desperdició ante Cobeño al no controlarlo bien. Poco después  Diego hacía lo propio con Jaime, al que cedía la pelota desde el suelo, para que el canterano, totalmente solo y con su pierna buena, batiese a placer la meta del Rayo: el Alba tomaba ventaja (Imagen: Gente). El Rayo no aparecía y cuando lo hacía era a través de Diamé, un portento físico, que mandó fuera los dos remates más peligrosos del los locales en la primera mitad. Aganzo era bien controlado y anulado por la defensa, más segura que otras tardes, y ni la entrada de Pachón al filo de la media hora, con cambio de sistema incluido, dió otro aire a la vanguardia local.

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En la reanudación, más madera con la entrada de Piti, pero que no se tradujo en nada bueno para los intereses de los de Pepe Mel. Al contrario: fue Xavi Jiménez, había entrado por Navas en el descanso, quién lograba el 0-2 en el lanzamiento de una falta con la colaboración de Alberto que despista a Cobeño al intentar peinar el lanzamiento. Y sin tiempo para mucho más, una salida de la cueva de Tarantino habilita a Costa que se va de todos cuantos le salen al paso plantándose solo ante el meta local. El remate del brasileño es interceptado por un defensa pero el rechace lo caza Tarantino, que había seguido la jugada, que anota el tercero de remate cruzado (Imagen: Gente).

Y lejos de mostrar signos de descomposición, el Alba seguía bien posicionado atrás y lanzando balones a un Costa que seguía siendo una pesadilla para la defensa local. Un remate alto de Diamé y otro de Pachón fue todo el bagage ofensivo del Rayo, que fue apagandose poco a poco. Aun pudo subir al marcador el cuarto si Diego Costa hubiese redondeado su gran tarde al transformar un penalti cometido sobre el mismo pero Cobeño le adivinó la intención y se estiró a su derecha para detener el lanzamiento.

Y, como no, no se puede pasar por alto la actuación de González González, al que pese al resultado encontramos eminentemente casero. Este árbitro es de los que no es capaz de proteger con sus decisiones a jugadores como Diego Costa, que ayer recibió por todos lados y de todos los colores, o a Kike Tortosa, a quien entre Jofre y Coke también le dieron cera. Obvió más de una cartulina amarilla para la defensa vallecana, por ejemplo Salva debió irse a la calle, y mostró amarilla cuando Costa fue derribado por detrás por el último defensor rayista. La ley de la ventaja tampoco es su fuerte y, por regla general, sus asistentes tampoco es que le facilitasen demasiado las cosas. Como homenaje a dicho personaje, mostramos esta imagen que rescatamos de nuestro archivo de árbitros ilustres del balompié pátrio y que patrocina Corporación Dermoestérica.


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La semana que viene visita el Carlos Belmonte el Levante. Los valencianos ya no se juegan nada y, dadas las derrotas de Alavés y Córdoba la pasada semana, una victoria del Alba puede significar la permanencia de manera casi virtual. Por lo que se refiere a mister y equipo, habrá que ver por que hombres y sistema se decanta Máximo Hernández cuando se trata de jugar ante su parroquia y de llevar el peso del encuentro tras de haber obrado el milagro de pasar de números de descenso a prácticamente lograr la permanencia en menos de una semana. Qizá la mayor incognita sea si se optará en casa por un planteamiento con dos delanteros o con un hombre en la media punta tras Costa de corte más ofensivo que Alberto. Kike Tortosa cumple ciclo de amonestaciones por lo que no podrá ser de la partida.

Bien: Costa. una auténtica pesadilla para la defensa rival. Participó en las jugadas de dos de los goles y realizó un partido bastante completo. Lástima que errase en el lanzamiento del penalti.

Mal: hoy dejamos desierto este apartedo.

El del Pito: González González. En un encuentro sin complicaciones, se mostró demasiado condescendiente con la dureza con la que se emplearon ciertos jugadores rayistas, en especial por lo que al marcaje de Diego Costa se refiere.