Empate a un tanto entre Alba y Oviedo en encuentro correspondiente a la cuarta jornada del Campeonato de Liga de Segunda División. Arribas adelantó a los asturianos en la primera mitad y Diamanká niveló en la segunda. El Alba sube el primer punto a su casillero y ocupa, a falta de que se complete la jornada, la vigésima posición en la tabla.
El once de Lucas
El mister optó por revolucionar tanto el once como el sistema y el equipo compareció con Tomeu, Isaac, Gorosito, Kecojevic, Caballo, Jean Jules, Diamanká, Álvaro Jiménez, Javi Navarro, Fuster, y Ortuño.
A las primeras de cambio
Fue mejor el Oviedo. Y no solo cuando los efectivos estaban nivelados, sino a lo largo y ancho del encuentro. Diez minutos tardaron los carballones en embocarla en la meta de Tomeu de la misma manera que ya nos ha pasado alguna vez este año: por medio de una falta lateral mal defendida. El primer remate de Obeng, que ya era franco y merecía premio, lo devolvió la madera y Arribas no tuvo más que empujarlo. Todo ello VAR mediante.
Empieza el baile
Diez minutos más tarde, en uno de los pocos balones profundos bien puestos de los blancos, era el mismo Arribas quien derribaba a Álvaro Jiménez cuando se iba solo hacia la meta visitante y dejaba a los suyos con 10. El balón parado consiguiente, otra de nuestras asignaturas pendientes, no se aprovechó más que para hacer que el recogepelotas fuese a por ella a la grada.
El control del Oviedo era más que evidente incluso con un hombre menos y, pese al trabajo de Jean Jules y Diamanká en el centro, acumulaban efectivos asfixiando la creación del Alba a la par que tocaban con una insultante facilidad cuando controlaban la pelota, en especial por la banda izquierda de su ataque, porque tampoco renunciaban a hacer que Tomeu fuese a buscar otra vez el balón a sus redes. La primera mitad se consumió con la sensación de que era mucho más factible ésto antes de que el Alba nivelase.
Ortuño
No voy a tratar de buscar ninguna explicación. Puede que ni la tenga, más allá de que somos el Albacete Balompié. Pero lo de Ortuño cara a puerta transciende mi entendimiento. Alfredo ha hecho buenos partidos esta temporada, casi todos, y a tenido opciones cara a puerta contraria. Pero lo de hoy parece escrito para la próxima de Almodovar. El remate de chilena que le saca Femenías nada más empezar la segunda mitad es para plantearse el sentido de la vida. Y el destino todavía le tenía reservada otra jugarreta al bueno de Alfredo en forma de penalti.
Diamanká
Buen partido cuajó Pape en su debut con la camiseta blanca. Y además hizo el primer tanto del curso, y a la postre consiguió el primer punto, con un disparo desde fuera del área que ejecuta tras una buena maniobra en el control.
Quedaba mucho y parecía que se podría acabar volteando la tortilla. Máxime tras un penalti cometido sobre Manu Fuster que supuso la segunda expulsión para el Oviedo. La responsabilidad la asume Ortuño. La ejecución no fue buena y Femenías rechazó con su estirada.
Contra nueve
Como decía al principio, incluso con nueve lo hizo bien el Oviedo que pese al agobio normal de la situación no pasó auténticos problemas más que en un remate de Zozulia que, otra vez más, desbaratan entre Femenías y la escuadra. Las sensaciones que quedan no son buenas y el análisis de la situación es, sin duda, complicado. Veremos como transcurren los próximos días porque pueden ser movidos.
El del pito y sus amigos
Hemos sufrido hoy el pavor de tener con nosotros a Rafael Sánchez López al pito y Sergi López Freixa y a Javier Garrido Concha a las banderas, de los comités murciano, catalán y castellano leonés, respectivamente. Debuta en la categoría. Éste tiene más peligro que una caja de bombas: criterio voluble, tarjetero hasta la saciedad y asistentes malos. Reputo mi impresión de hace quince días: para mí que a poco que se le venga encima algo complicado, peta.
A continuación la galería de fotos del encuentro: