El entrenador del Albacete compareció para hablar sobre la eliminatoria copera y lo primero que hizo fue quejarse de tanto viaje y los pocos entrenamientos “de calidad” que puede realizar. “La sesión de recuperación no es efectiva, la de hoy no es efectiva… me gustaría tener más trabajo”, indicó Alejandro Menéndez, que insistió en que “debemos ver la botella medio llena”.

Sobre el Córdoba aseguró que “nos vamos a encontrar con un equipo que está donde está”, en referencia a militar en Segunda B, “pero que por jugadores y por nivel es de Segunda División”, por lo que “la prueba será muy exigente y objetiva, a la hora de ver nuestro nivel”.

El técnico quiere que sus jugadores afronten los partidos con una mayor tranquilidad a la hora de buscar las acciones ofensivas, que haya más positividad a la hora de buscar y encontrar ese gol que no llega. “Debemos buscar una sensación de confianza, de no precipitarse. Se junta un poco todo. Tenemos que buscar concentración y que esos mecanismos en la última fase del campo sean más naturales, que no se precipiten. Ese último pase, el remate, es cuestión de timing, de buscar el momento, de pensar en el acierto, en lugar de que la voy a fallar. Es ajustar la cabeza”.

“El sábado sacamos 23 centros… tenemos que buscar la efectividad, que el balón acabe en la red, buscar convencimiento en el remate, ser positivos.  Todo llegará a base de ganar confianza, de superar esa barrera que tenemos ahora mismo”, añadió.

Menéndez dijo que viajarán tres jugadores del filial (Diego Vargas, Samu  Vázquez y el ecuatoriano Emerson Espinoza) y recordó que para el encuentro de Liga ante el Mirandés “somos sensibles a la baja de Roman Zozulia (con covid) y Álvaro Jiménez (expulsado en Castellón). Son dos jugadores muy importantes y en esas posiciones tenemos una limitación, sobre todo en efectividad y rendimiento. A partir de ahí hay que cuidar cosas, porque el partido del lunes es muy importante. Lo único malo que puede tener el partido en Córdoba es que algún jugador cayera lesionado o tuviera algún tipo de sanción, donde no pudiera estar el lunes, lo que nos limitaría más todavía. El equipo que salga en Córdoba tiene que ser competitivo. Ya les he dicho a los jugadores, esto es un juego de hombres y no valen las disculpas. Hay que salir, dar la cara, ser nosotros mismos y ganar un partido que, aunque sea de Copa, nos daría mucha confianza”.

Se le cuestionó al entrenador del Albacete como se puede frenar esos errores que tanto penalizan, como los penaltis cometidos, pues en Castellón fue el séptimo que se le señala al equipo esta temporada. “Son muchos penaltis, es cierto, pero fue muy riguroso, en eso estamos todos de acuerdo. Les está pasando a muchos equipos, llámese el Alcorcón, por ejemplo, que también había caído en ese pozo de situaciones, de pesimismo, de situaciones que nos los jugadores no comprendían. A base de concentración, la concentración te da acierto y el acierto te da confianza. A partir de ahí se tienen que ir desvaneciendo ese tipo de jugadas que al final te llevan al traste, a un mal resultado”