El Albacete Balompié presentaba en la mañana de este viernes a su último fichaje, el menorquín Rubén Martínez, que después de cuatro temporadas en la U.D. Logroñés y de ganarse el cariño de la afición explicaba como se había producido su llegada a conjunto manchego: “en primer lugar dar las gracias al club y a la dirección deportiva. Cuando sale la opción de que podíamos venir al Albacete a mí me gustaba mucho el proyecto porque creo que va a ser ganador y no tenía muchas dudas y estoy muy feliz. Sí que es cierto que es bonito salir de un sitio como Logroño, cuando además no eres de allí, con el cariño que me han dado. Espero en esta etapa ascender tal y como lo conseguimos allí”.
El centrocampista, con un largo recorrido en la categoría y que llega a una plantilla muy nueva y muy joven a aportar veteranía hablaba sobre lo que ha encontrado en el vestuario: “todo muy bien, la gente muy simpática y con esa mezcla de gente joven con gente más experimentada que puede ir muy bien. La acogida ha sido muy buena y ahora toca adaptarme cuanto antes a lo que pida el míster y a los compañeros y con ganas ya de empezar".
Martinez llega a un equipo en el que, su tocayo, Rubén de la Barrera exige mucho ya desde los entrenamientos algo que el jugador valoraba de forma positiva: “ya lo conocía de haberme enfrentado; hemos tenido sólo la oportunidad de entrenar hoy y ayer un poquito y ahora a coger los conceptos que pide el míster y que todos entrenemos al máximo para que la competitividad aumente".
Rubén Martínez habló también sobre su estado físico: "acabamos el 30 de junio contrato y llego después de haber estado entrenando por mi cuenta. Ahora a ponerme en forma, pero vengo bien preparado".
Futbolista zurdo que habitualmente juega a pierna cambiada pero que se considera versátil: “soy un extremo que dónde más cómodo se siente es en banda derecha pero puedo actuar en las tres medias puntas: en izquierda, derecha o por el medio. La idea, imagino, que será al principio comenzar por la derecha pero al final es lo que demande el míster y lo que necesite y sea bueno para el equipo".
Sobre si sentía preparado para jugar ante el C.D. Castellón este sábado decía: “no sé, no lo hemos hablado todavía, yo me encuentro bien, pero lo decidirá el míster".
Presentado en un viernes 13, Rubén Martínez declaraba no ser especialmente maniático o supersticioso ni tener las típica manías futboleras para prepararse: “más que manías tengo costumbres o hábitos. No soy muy supersticioso salvo alguna pequeña tontería".
El jugador nacido de Mahón tiene claro a qué tipo de equipo y proyecto llega: "es un proyecto exigente pero bonito, yo me considero una persona ganadora y luchadora a la que le gustan los retos y mi reto es ascender con el Albacete, está claro que eso pasa por hacer las cosas muy bien. No se asciende en la jornada 1 pero hay que ir con la ambición de hacer las cosas bien y a la vez teniendo paciencia".
Por último y cuestionado por las claves para conseguir el éxito del ascenso, Rubén lo tenía claro: "creo que vamos a tener a la afición ahí detrás que eso es muy importante, que empuje y luego la temporada es muy larga, pasas por altibajos pero es muy importante que el equipo esté unido y a darlo todo para que en junio consigamos el ascenso".
