La competición en la Primera RFEF está llegando a su punto más caliente. Cuando termine marzo quedarán esas 10 jornadas de las que siempre hablan los entrenadores que es cuando se juega todo y a las que hay que llegar lo mejor colocados posible. El Albacete pelea por estar ahí, luchando por esa primera plaza que otorga el ascenso directo, pero son varios los rivales que tienen el mismo objetivo y por ello el envite no es nada fácil.

El cuadro manchego cuenta con una de las mejores plantillas de la categoría, pero eso no es suficiente. Hay que ganar partidos, sumar muchos puntos, porque el ascenso estará muy caro a tenor de la pelea que se intuye habrá por la parte de arriba. Y el tema es que el cuadro de Rubén de la Barrera no ha logrado recuperar esa dinámica tan positiva con la que acabó 2021 y que quedó frenada por los diferentes parones que se fueron produciendo, primero por las vacaciones navideñas, luego por la disputa de la Supercopa y luego por el brote de Covid que afectó al Alba.

El caso es que el equipo se muestra irregular, es capaz de remontarle al Barcelona B en el Johan Cruyff y terminar empatando cuando había hecho lo más difícil, lo mismo que se dejaron escapar dos puntos frente a un Sabadell que empató en una segunda parte en la que jugó con un hombre menos. Puntos que han volado y que se pueden echar en falta al final del campeonato. El pasado fin de semana el envite era serio, frente al líder Villarreal B y el Alba jugó un gran partido y ganó, mostrando superioridad.

Ahora toca jugar ante un San Fernando que marcha como un cohete. En la jornada 10 visitó el Belmonte en puestos de descenso y el Alba ganó 1-0, no sin dificultades. El cuadro gaditano ha experimentado desde entonces un crecimiento importante, que se ha puesto de manifiesto con un buen arranque en la segunda vuelta, en la que solo ha perdido un partido. Ahora mismo acumula tres victorias consecutivas, que le han valido para meterse en la zona de playoff, concretamente en la quinta plaza, con 40 puntos, cinco menos de los que tiene el Albacete, que juega el próximo martes su partido aplazado con el Real Madrid Castilla.

El cuadro de Nacho Castro está con mucha confianza y en su última aparición en el Iberoamericano doblegó al Castilla con un gran respaldo del público, lo que el técnico espera que se vuelva a repetir frente al Albacete.

Rubén de la Barrera ha dejado claro en la previa que tener que jugar el martes en Madrid y recibir después al Atlético Baleares no condicionará su equipo. El técnico solo piensa en lo más inmediato, que es San Fernando, y pondrá a todo lo que tiene para tratar de conseguir los tres puntos. Después ya se verá lo que hay para el próximo partido, porque además hay varios jugadores -hasta cinco, cuatro de ellos titulares indiscutibles- con cuatro tarjetas, al borde de la suspensión, lo que tampoco preocupa al gallego.

Se espera un partido incómodo, en el que cada uno intentará frenar las virtudes del otro como principal arma para ganar. El San Fernando viene tocado por una varita mágica cara al gol, pues ha marcado tres tantos en sus tres últimos encuentros, algo que se le resiste hacer a un Albacete capaz de generar muchas llegadas al área rival pero al que le cuesta mucho materializar, aunque atrás es el segundo equipo menos goleado a tan sólo un tanto del Nástic.

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El míster avilesino del San Fernando hablaba también este viernes en sala de prensa de las virtudes del Albacete del que señaló que “tiene un potencial enorme y cuenta con jugadores diferenciales para la categoría” además de una “propuesta excelente” por parte de su entrenador que le hace “dominar muchos registros y automatismos tanto en defensa como en ataque”.

Castro también dejaba caer en su comparecencia la presión que puede tener el Albacete a diferencia de su equipo: “son un equipo que, por historia y presupuesto, están obligados a ascender de categoría y nosotros podemos concentrarnos en soñar con seguir compitiendo, ser valientes e ir a por la victoria”.

En lo que respecta a lo deportivo, el conjunto andaluz tiene a la mayor parte de su plantilla disponible ya que tan sólo el lesionado de larga duración Djack Traoré, así como el lateral derecho Saúl González, aquejado de algunas molestias, se perderán el encuentro. Juan Rodríguez, que no estuvo ante el UCAM Murcia por amonestaciones será con toda seguridad de la partida en el equipo gaditano.

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El colegiado designado por el comité técnico de árbitros para este encuentro es el canario de 34 años de edad Alexandre Alemán Pérez que, con la presente, afronta su decimotercera temporada consecutiva en la categoría de bronce del fútbol español.

Todo un veterano que, sin embargo, tan sólo dirigió en una oportunidad al conjunto manchego, fue en la campaña 2012-2013 en un Écija 0 – Albacete 0 con Luis César Sampedro en el banquillo blanco.

Cuatro han sido los encuentros del San Fernando en los que el trencilla de Las Palmas  ha impartido justicia, tres en liga y uno en copa esta misma temporada, y los mismos se saldan con una vitoria azulina, un empate y dos derrotas.

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