El futbolista vizcaíno del Albacete, Lander Olaetxea, comparecía ante los medios y, en sus primeras palabras, hablaba sobre el buen ambiente que se vive en el vestuario tras el triunfo ante el que hasta el pasado domingo era líder de la categoría: “ha sido una semana para recuperar confianza; veníamos de una racha en la que nos estaba costando encontrar las sensaciones que teníamos y la mejor manera de superar esa racha era ganando en casa al líder y realizando un partido completo como el que hicimos. Ha sido importante conseguir esa victoria en un campo tan complicado”.

El Alba, penúltimo equipo de Segunda División con menor límite presupuestario, está muy por encima en los futbolístico de lo que ese presupuesto podría indicar, algo que el centrocampista blanco intentaba explicar: “es un cúmulo de cosas, tenemos un grupo muy bueno y trabajador, luego tenemos jugadores con talento. Cuando se junta todo eso salen las cosas bien”.

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Tampoco se olvidaba Lander de Rubén Albés y de su cuadro técnico y reconocía la buena parte de culpa que ellos también tienen en esta buena marcha del equipo: “trabajan mucho, tanto a la hora de analizar a los rivales como dándonos a nosotros estrategias para ganar los partidos. Siempre hay rachas buenas y malas, pero estamos intentando ser constantes y mantener las sensaciones positivas”.

Sobre las claves para saber como hacer daño al rival, decía: “analizamos durante la semana como enfocar el partido. Luego intentamos ceñirnos al plan y cuando lo hacemos vemos que sacamos resultados, por lo que hay confianza en lo que nos mandan”.

El equipo afronta este último partido del año y de la primera vuelta con veintinueve puntos; marcando once con el descenso y a tan solo tres del play-off por el ascenso: “cuantos más puntos saquemos ahora más cerca estaremos del objetivo. Este último partido nos puede llevar a tener 32 al parón navideño, lo que nos daría una tranquilidad importante. Sería increíble acabar la primera vuelta con 32 puntos y redondearlo con un triunfo en casa sería perfecto”.

Cuestionado por las declaraciones de Rubén Albés en la misma Sala de Prensa de Estadio de Gran Canaria, en las que llamaba la atención sobre el próximo rival Ibiza y su peligrosidad aún a pesar de ser últimos, el jugador vasco también era prudente: “ellos están en una situación muy complicada y van a salir a morder. Nosotros trataremos de conseguir los tres puntos. Están metidos abajo, van a venir a cara de perro así que habrá que trabajar mucho para sacar los tres puntos”.

El mediocentro también respondía sobre ese polémico horario (14:00h) del encuentro del domingo y no se mostraba para nada contrariado sino al revés: personalmente me gusta la hora, porque me gusta jugar por la mañana y es lo más cercano”.

También era preguntado el de Abadiano por el partido de Copa ante el que fuera su equipo durante tres temporadas y con el que obtuvo continuidad en el futbol profesional: “la Copa es una competición que ilusiona mucho, que son partidos bonitos para vivirlos como jugadores y como aficionados. Será un partido complicado, con un toque navideño”.

En el plano personal, Lander dijo: “estoy muy cómodo en la ciudad y en el vestuario y todo eso se traslada al campo. Disfrutando del momento”.

Asentía Olaetxea cuando se le interpelaba sobre si el jugar ante equipos potentes les daba una motivación especial: “puede ser; nos han salido partidos buenos contra los equipos de arriba, también puede ser por la manera de jugar que tenemos y que tiene el rival de querer ir a por el partido. Nos gusta ese fútbol emoción que dice el míster y contra los equipos de arriba da mejores resultados, pero nos tenemos que adaptar a jugar otro tipo de fútbol y sacar adelante también los partidos contra los rivales de la zona baja”.

Cerraba la rueda de prensa Lander afirmando que no mira ni para abajo ni para arriba, sino que: “miro al Ibiza para intentar sacar los tres puntos”.