Nueva jornada de Liga para el Albacete Balompié, una jornada marcada por la necesidad de puntuar ya que, de no hacerlo, la cerraría en puestos de descenso. Los blancos dependen de si mismos ya que sumar de tres les valdría para salir de la zona roja y volver a meter en la misma al Alcorcón. Semana de pasión por tanto también para el equipo blanco ya que muchas de las opciones de permanencia pasan por el Carlos Belmonte y tanto el encuentro de este lunes como el del próximo sábado se hacen capitales para el devenir del equipo en la categoría.

Rubén Albes podrá contar con casi toda seguridad con Higinio Marín y con Dani Escriche y perderá a Álvaro Rodríguez por acumulación de cartulinas y por lesión. Lunes en el también cabe destacar que se pondrá de largo la nueva iluminación del feudo manchego; esperemos que la lluvia respete y pueda acudir al estadio la mayor cantidad de público posible.

En esta ocasión visita el Belmonte el Racing de Ferrol, el que sin duda en una de las revelaciones de la competición, un recién ascendido que prácticamente cuenta con la mayoría de la plantilla de la pasada temporada a la que supo sacar el máximo rendimiento su míster Cristóbal Parralo y a la que se han sumado buenos refuerzos que hacen de este Racing un equipo muy competitivo y difícil de doblegar; eso sí hay un Racing en A Malata y otro fuera de casa.

Para analizar a los ferrolanos vemos que juegan con un esquema de 4-2-3-1 claro con un bloque de presión medio-alto. No es un equipo que se meta atrás a esperar a su rival, más bien todo lo contrario, tienen una buena activación de recuperación tras perdida lo que los hace muy peligrosos si son capaces de robar con su rival saliendo. A esto le sumamos un movimiento de líneas en la presión muy bueno y coordinado para que su rival tenga difícil salir jugando y no dejar espacios entre líneas.

Un equipo el gallego muy equilibrado tanto con balón, ya que quieren crecer en el juego, cómo sin balón ya que son muy solidarios en todas sus líneas a pesar de tener una baja importante como la de Carlos Vicente que se marchaba este mercado invernal al Deportivo Alavés. Aun así, los costados son uno de los canales más utilizados en ataque sino el que más, con laterales muy largos y verticales para buscar centros laterales que conecten con sus puntas ya que el juego aéreo lo controlan muy bien con hombres de envergadura y que se desenvuelven muy bien en esas situaciones como Sabin Merino.

El juego interior es otra variante ofensiva que suelen utilizar, juntando la línea de tres con los mediocentros para jugar una especie de rombo en el medio y ganar así la superioridad y por tanto el balón, desde ahí lanzan ataques filtrando pases por dentro aprovechando el desorden del centro del campo al perder la posesión de pelota su rival. En cualquier caso, casi que apostamos por ver a un Racing cargando balones el área manchega ya que el staff técnico ferrolano sabrá de las carencias del Albacete en esos centros laterales.

En el aspecto defensivo con balón son muy solidarios y eso les convierte en una defensa muy rocosa que empieza en el centro del campo achicando espacios entre líneas para contribuir a que sus centrales defiendan siempre de cara; es ahí cuando no son capaces de defender y cuando peor lo pasan ya que el repliegue defensivo si alguna línea se queda colgada es más lento y deja espacios atrás.

El balón parado en estático es bueno por lo general, pero cuando hablamos de balón aéreo en movimiento la cosa cambia ya que los despistes en marcas los pagan caros. No olvidemos que el Albacete ya les hizo cuatro dianas en A Malata. Es un equipo que mide muy bien los tiempos pero que en los tramos finales equilibra muchos partidos.

En definitiva, una final para los de Rubén Albes sino quieren ver cómo sus rivales van sumando y eso puede ser muy peligroso para sus intereses, por no decir lo cuestionado que quedaría el técnico vigués de no sumar de tres; pero esto es futbol y puede pasar de todo, desde aquí animamos a la gente a apoyar al equipo para entre todos sacar adelante una situación complicada.

Uno de los onces que Cristóbal Parralo puede poner sobre el verde del Belmonte podría ser el formado por: Ander Cantero; Sergio Cubero, Jon García, David Castro, Moi Delgado; Alex López, Jesús Bernal; Oscar Pinchi, Iker Losada, Nico Serrano; y Sabin Merino.