Llegó la hora y después de la pretemporada, discreta pretemporada, aunque son partidos para hacer pruebas y ponerse a punto, llega el inicio del curso liguero y el Alba tendrá el honor junto al Granada C.F. de abrir el año futbolístico en LaLiga Hypermotion. Será este jueves día 15 a partir de las 20:30 horas en el Estadio Nuevo los Cármenes.

Un Alba que se presenta en esta competición con muchas novedades, muchas salidas de gente importante como Manu Fuster, Lander Olaetxea o el propio Bernabé y con muchas llegadas; algunas de ellas de muchos kilates para esta competición y para lo que el Albacete puede aspirar en el mercado. La incógnita es como va a encajar Alberto González las nuevas piezas en su esquema para sacarles el máximo rendimiento.  De momento el primer capítulo es muy pero muy exigente frente a uno de los cocos del campeonato que aspira a volver un año después a la máxima categoría. Para eso los Guille Abascal se han reforzado bastante bien sumando a lo que ya tenían con hombres como Ozuni, Lucas Boye o Sergio Ruiz, otros de mucho nivel. Una plantilla, sin lugar a dudas, con olor a primera viendo los jugadores que posee.

El Granada es, a día de hoy, toda una incógnita, ya que su nuevo técnico Guille Abascal, aparte de ser muy joven, no tiene experiencia en el fútbol español más allá de haber dirigido al juvenil del Sevilla en la Promises Cup. Eso si, experiencia internacional tiene; sobre todo en Italia donde dirigió a equipos como el Lugano o el Ascoli. Su última aventura antes de aterrizar en el Granada fue en la liga rusa donde dirigió al histórico Spartak de Moscú.

Vamos a intentar desmigar el que podría ser el juego de este Granada y digo vamos a intentar porque a estas alturas de temporada es toda una quiniela.

El esquema más utilizado por el técnico sevillano en un claro 4-3-3 ofensivo con un bloque de presión medio-alta más bien tirando a bloque alto con un equipo muy intenso en esa faceta, que quiere robar cerca de portería rival para en pocos pases tener opción de incomodar al oponente. Otro aspecto que habla de la intensidad de este equipo es la buena activación que tienen en pérdida de pelota en campo contrario siendo muy solidarios en la presión y colocación en el campo. En conjunto el nazarí, que tiene varias opciones ofensivas: que puede jugar con sus bandas muy largas llegando hasta línea de fondo, y que a la misma vez puede jugar al despiste con diagonales por dentro para obligar a la defensa a seguirles y dejar espacios en los costados. Son muchas las variantes ofensivas que posee este equipo; otra de ellas, aunque la hemos visto menos en esta pretemporada, es el juego directo y aunque les gusta salir jugando con la pelota desde campo propio no es de extrañar que si se ven amenazados por una buena presión opten por el juego más directo buscando a Lucas Boyé para bajar esos balones que ayuden a estirar del equipo. Aunque si de potencial ofensivo hablamos; el juego aéreo con los lanzadores y carrileros que tienen juntos a hombres de envergadura como el ya mencionado Lucas Boyé ,Ozuni o Ignasi Miquel cuando se incorpora, son un auténtico peligro dado que este equipo trabaja muy bien la estrategia a balón parado y explotan ese potencial.

Uno de los debe que vemos ahora mismo en este equipo en la variante ofensiva es la falta de puntería que han mostrado sus delanteros; algo que no preocupa demasiado pero que el propio Abascal ha reconocido que tienen que mejorar.

En el aspecto defensivo es donde más dudas crea este equipo ya que hasta ahora está lejos de lo que su míster quiere, que no es otra cosa que cerrar la portería, algo que en pretemporada no hanb conseguido por varios motivos: una de esas razones es que, como pretemporada que es, no han terminado de encajar las fichas en el organigrama defensivo. De hecho, sin ir más lejos, ayer mismo hacían oficial la contratación de Manu Lama que vendría para apuntalar la defensa. Otro de los aspectos que Abascal pide mejorar y que está lastrando al cuadro nazarí son los errores en salida de balón. Un equipo como este al que le gusta salir jugando tiene que afinar mucho a la hora de la transición defensa-ataque, ya que un fallo en algún pase se traduce en ocasión de gol para su rival. Por último, otro aspecto a mejorar, como todo equipo al que le gusta la presión alta, es que deja mucho espacio a su espalda y a estas alturas de temporada ni los equipos están engrasados ni los físicos están a punto y esa puede ser una buena baza para los hombres de Alberto González: aprovechar esos espacios con hombres rápidos como Jon Morcillo.

A la hora de defender el balón aéreo es un equipo muy fiable ya que por arriba conceden poco y las segundas jugadas las atacan también bastante bien.

En definitiva, creo que no hay mejor escenario que un estadio de primera para arrancar está temporada, eso sí me atrevería a decir que la palabra a la que nos tenemos que acostumbrar es “Paciencia”. Son muchos cambios y las piezas cuesta que encajen.

Uno de los onces que Guille Abascal podría poner en liza para el debut en liga podría ser el formado por: Luca Zidane; Ricard Sánchez, Ignasi Miquel, Miguel Rubio, Carlos Neva; Martin Hongla, Sergio Ruiz, Gonzalo Villar; Weissman, Lucas Boyé y Myrto Ozuni.